Colibrí de Perijá

Nombre científico: Metallura iracunda

Autoridad taxonómica: Wetmore, 1946

Notas taxonómicas:

Sinónimos:

Phylum: Chordata

Clase: Aves

Orden: Apodiformes

Familia: Trochilidae

Género: Metallura

Categoría: Vulnerable Vulnerable

Criterio: D2

Nombres comunes:

colibrí de Perijá, metalura de Perijá, metalura iracunda, Perija Metaltail

Descripción:

Colibrí considerado muy hermoso por el color de su plumaje. Su cabeza es verde oscuro, y el resto del cuerpo es negruzco lustrado con destellos dorados y cobrizos verdosos. La parte anterior de su corona es verde oscuro brillante; la garganta tiene un tono verde esmeralda muy luminoso con matices malaquita, y pecho y vientre son de un verde oliva negruzco. Su cola es medianamente larga, ancha, horquillada y de intenso rojo púrpura. Mide entre 10 y 11 cm de alto, siendo el macho de mayor talla. La hembra es más clara y de menor tamaño (Phelps Jr. y Meyer de Schauensee 1979, Hilty y Brown 1986, BirdLife International 2000, Hilty 2003, Restall et al. 2007, Heindl et al. 2015).

Distribución:

Metallura iracunda es endémica de la sierra de Perijá en la frontera de Venezuela y Colombia. En nuestro país solo es conocida en los cerros Pintado, Viruela, Tres Tetas y es probable que en Sabana Rubia, de la sierra de Perijá, estado Zulia, además de la porción adyacente de Colombia. Ocupa una estrecha franja altitudinal desde 1.850 a 3.200 m de altitud en bosques enanos y áreas parcialmente abiertas con arbustos y vegetación baja, y herbazales de páramo (Phelps Jr. y Meyer de Schauensee 1979, Hilty y Brown 1986, BirdLife International 2000, Hilty 2003, Restall et al. 2007, López-O. et al. 2014, Heindl et al. 2015).

Situación:

En Venezuela es una especie muy poco conocida, escasa, de distribución restringida y localizada en Perijá, y se considera como Posiblemente Amenazada (Hilty y Brown 1986, Restall et al. 2007). Estudios sobre su biología y ecología son prácticamente inexistentes, pero se estima que podría ser especialista en hábitat, con una distribución muy restringida y con poblaciones en declive. En Colombia es desde «poco común hasta bastante común» (López-O. et al. 2014). La sierra de Perijá está catalogada como uno de los ambientes más amenazados del norte de los Andes, y de Venezuela (Rodríguez et al. 2004b). Sin embargo, por su distribución altitudinal por encima de 2.000 m y posiblemente asociada a arbustales, tal vez no se encuentre amenazada. A escala global BirdLife International la considera En Peligro (BirdLife International 2000, IUCN 2014). En Colombia se reporta En Peligro debido a su distribución limitada y a la pérdida de hábitat (Renjifo et al. 2002, Heindl et al. 2015).

Amenazas:

Aunque su área de distribución es señalada como muy amenazada, no se conoce con precisión la frecuencia, intensidad e impacto de dichas amenazas. Se indica que la destrucción y el deterioro ambiental en la sierra de Perijá podrían tener severas consecuencias sobre Metallura iracunda, si bien el área es de difícil acceso por la presencia de grupos guerrilleros, principalmente del lado de Colombia. Entre las amenazas a su localidad tipo se incluyen los cultivos ilícitos, la colonización no controlada, la ganadería y la minería asociada a la extracción de carbón, cobre, calizas, arcillas, fosfatos y barita. También se ha reportado que dichas actividades están siendo facilitadas por la construcción de carreteras, en especial en el lado colombiano. Algunas áreas de la región, como el caso de cerro Tetari, permanecen en buen estado de conservación y con sus ecosistemas originales casi intactos. En otros casos, como cerro Pintado, solo se cuenta con remanentes de bosques en las laderas de la montaña (BirdLife International 2000, Renjifo et al. 2002, Freile y Santander 2005, Restall et al. 2007).

Conservación:

Como todas las especies de la familia Trochilidae, M. iracunda se encuentra incluida en el Apéndice II de la Convención sobre el comercio internacional de especies amenazadas de fauna y flora silvestres (CITES 2014). Su hábitat es parte de dos Áreas de Importancia para la Conservación de las Aves, entre las cuales el Parque Nacional Sierra de Perijá es considerado como la superficie de Venezuela con mayor número de especies vulnerables (Freile y Santander 2005). La sierra de Perijá constituye una de las prioridades más altas para la conservación de las aves en Venezuela (Rodríguez et al. 2004b). Gran parte de su hábitat se encuentra localizado en el Parque Nacional Sierra de Perijá, aunque la efectividad del resguardo que ofrece esta figura legal no es muy alta, debido a su inaccesibilidad, falta de presupuesto, de personal, y por la presencia de grupos irregulares. La especie también se consigue en la Zona Protectora San Rafael de Guasare, una figura de protección menos rígida y controlada que el parque nacional. En Colombia su hábitat no está protegido sino por una reserva privada. Se recomienda realizar estudios poblacionales y en torno a su historia natural, así como la evaluación del estado actual de su hábitat, de preferencia utilizando series temporales de imágenes percibidas remotamente. También es importante mejorar el manejo y lograr la efectiva protección del Parque Nacional Sierra de Perijá, haciendo extensivas estas medidas hacia el territorio colombiano (BirdLife International 2000, Rodríguez y Rojas-Suárez 2003).

Ilustrador: Pigmalion's Workshop

Autores:

Christopher J. Sharpe y Miguel Lentino.

Cita sugerida

Sharpe, C. J. y Lentino, M., (2015) Colibrí de Perijá, Metallura iracunda, En: J.P. Rodríguez, A. García-Rawlins y F. Rojas-Suárez (eds.) Libro Rojo de la Fauna Venezolana. Cuarta edición. Provita y Fundación Empresas Polar, Caracas, Venezuela., Recuperado de: www.especiesamenazadas.org/taxon/chordata/aves/apodiformes/trochilidae/metallura/colibri-de-perija Viernes, 26/04/2024