Nombre científico: Atelopus tamaense
Autoridad taxonómica: La Marca, García-Pérez y Renjifo, 1990
Notas taxonómicas:
Aun cuando no fue mencionado en la descripción original, el nombre científico fue construido como un sustantivo en aposición al nombre genérico, en referencia al páramo de Tamá.
Sinónimos:
Phylum: Chordata
Clase: Amphibia
Orden: Anura
Familia: Bufonidae
Género: Atelopus
Categoría: En Peligro Crítico
Criterio: A2ace+A3ce
Nombres comunes:
sapito arlequín de Tamá, ranita arlequín de Tamá, Tama harlequin frog
Descripción:
Es una rana de hábitos diurnos y terrestres. La coloración dorsal de los adultos es variada y puede ser uniformemente marrón chocolate, parda o pardo grisácea sobre fondo crema o, incluso, verde azulado claro. Tanto la región posterior del dorso, como las superficies dorsales de las patas muestran abundantes tubérculos. Los miembros posteriores son cortos y no presenta el hocico proyectado. La parte posterior del vientre es amarillenta o rojiza. Los juveniles exhiben manchas azules en el abdomen, y los renacuajos son de color crema con manchas grandes negras. Los machos adultos miden unos 3,75 cm, mientras que las hembras, de mayor tamaño, alcanzan tallas de 4,49 cm (La Marca et al. 1990, La Marca y Lötters 1997, La Marca y Soriano 2005). Los únicos ejemplares conocidos de la especie fueron encontrados caminando o bajo rocas en los alrededores de riachuelos. Es la única especie venezolana de Atelopus que vive en un sitio completamente abierto, donde se encontró la mayor parte de los especímenes colectados, y se escuchó a un número indeterminado de machos cantando en una turbera que cubre gran parte del páramo de Tamá (La Marca et al. 1990).
Distribución:
Especie endémica de los Andes de Venezuela, restringida al páramo de Tamá, solo conocida por la descripción original basada en colecciones realizadas en agosto de 1987. El área de su distribución conocida abarca ambientes parameros en las cercanías del boquerón del río Oirá, en el páramo de Tamá, Parque Nacional El Tamá, municipio Páez del estado Apure, a elevaciones entre los 2.950 y 3.200 m. Sin embargo, es probable que se encuentre en lugares cercanos a la localidad típica, en el estado Táchira, e incluso en zonas adyacentes de Colombia al otro lado del río Oirá, a juzgar por la cercanía y la continuidad de hábitat así como por sus cantos escuchados en territorio colombiano. No obstante, hasta que se disponga de ejemplares comprobatorios, se le seguirá considerando como endémica de Venezuela (La Marca et al. 1990, 2010c, La Marca y Soriano 2005).
Situación:
Únicamente se conoce por la colección original, cuando fue reportada como una especie abundante, aunque solo se colectaron once ejemplares juveniles y una pareja de adultos. No se tiene información sobre su situación concreta; búsquedas recientes desde el lado colombiano no tuvieron éxito en localizar ejemplar alguno. Se presume que sus poblaciones fueron afectadas al igual que las de otras especies parameras del género Atelopus en Colombia y Venezuela (La Marca y Soriano 2005). A nivel nacional, así como en el ámbito global, se le considera En Peligro Crítico (La Marca y García-Pérez 2008, La Marca et al. 2010c).
Amenazas:
No se pueden atribuir las disminuciones de las poblaciones a ninguna causa específica, ya que se desconoce cuáles amenazas podrían estar enfrentando, pero se presume que pudo haber sido afectada por la presencia del hongo quítrido Batrachochytrium dendrobatidis, patógeno responsable del declive de muchas agrupaciones de anfibios a escala mundial. Igualmente, podrían haberse visto afectadas por variaciones en los regímenes climáticos, por las sequías y crecidas de las quebradas y otros cambios del clima, como se ha reportado para otras especies relacionadas (ver Atelopus carbonerensis y Atelopus mucubajiensis) (La Marca y Soriano 2005, La Marca y García-Pérez 2008, La Marca et al. 2010c). De igual manera, aunque no se cuenta con reportes sobre el estado de conservación de la localidad típica, en la zona son frecuentes los deslizamientos de tierra por la inestabilidad del terreno y las altas pendientes, lo que podría provocar reducciones bruscas del número de ejemplares.
Conservación:
En el territorio venezolano fue declarada En Peligro de Extinción por medio del decreto N° 1486 (del 11 de noviembre de 1996) (Venezuela 1996b). Su área de distribución se encuentra amparada bajo la figura legal que preserva al Parque Nacional El Tamá; sin embargo, aún no se ha evaluado cuán efectiva es esta área para el resguardo de la especie. La única localidad conocida es remota y de difícil acceso, lo que podría representar una salvaguardia a su hábitat. No obstante, evidencias de quema en el lugar sugieren que este factor puede afectar a las poblaciones y acentuar su grado de amenaza. Se recomienda iniciar programas de monitorización a la mayor brevedad para determinar su situación poblacional, así como llevar a cabo estudios sobre la calidad de su hábitat y el análisis de las diversas causas que la pudieran estar afectando (La Marca y García-Pérez 2008).
Ilustrador: Ximenamaria Rausseo
Autores:
Enrique La Marca
Cita sugerida
La Marca, E., (2015) Sapito arlequín de Tamá, Atelopus tamaense, En: J.P. Rodríguez, A. García-Rawlins y F. Rojas-Suárez (eds.) Libro Rojo de la Fauna Venezolana. Cuarta edición. Provita y Fundación Empresas Polar, Caracas, Venezuela., Recuperado de: www.especiesamenazadas.org/taxon/chordata/amphibia/anura/bufonidae/atelopus/sapito-arlequin-de-tama Jueves, 21/11/2024